Desnuda.

Y ahi estaba ella, desnuda, sentada para mi, casi parece un espectaculo, observarla asi tan despreocupada, mientras en el lienzo el pincel cobra vida y guian mis manos.  En cada pincelada da a luz un nuevo matiz de su cuerpo, ella con su cigarro entre calada y risas, me detengo a apareciarla, estoy absorto hasta que ella se encuentra con mi mirada.

- ¿Estoy bien asi? -me dice con algo de curiosidad-

- Asi estas perfecta.

Me miró y solo me dedico una sonrisa calida, intento seguir con mi labor pero sus movimientos me distraen; me encienden, puedo imaginarla entre mis brazos, tocandola, cada centimetro de su piel delicada y tersa, viendo esa misma sonrisa entre mis sabanas, reclamandola, siendo solo mia.  Los musculos se me tensan y mi respiracion se contrae cuando el pincel delinea cada curva de ese monumento que esta sentado frente a mi, quizas este soñando o volviendome loco, la deseo; asi como la luz de sol candente que baña su cuerpo durante el dia.

Mi respiracion se agita cada vez mas cuando el pincel marca aquellos redondos y suaves senos que caen sobre aquel pecho tan escultural, me moria por besarlos y apretarlos con mucha suavidad y delicadeza, envolver sus perfectos pezones rosados en mi lengua calida y humeda que se derrite dentro de mi boca y que me hace regresar al presente y asi poder seguir con tan perfecta obra, pero era imposible para mi no tensar mis musculos y pensar en otra cosa que no sea estar entre esos delicados muslos lamiendo suave, sintiendo ese calor que sale de sus poros, Maldicion!!! porque no deja de moverse? sabe que es irresistible para mi no mirar su entrepierna y perderme en tan delicada vagina que muero por probar, lamer y darme un festin de sabores que estoy seguro puede darme.

En mi mente solo me veia hundiendome una y otra vez entre esas largas piernas que escondia un mar de placer, un mar en el que me moria por ahogarme pero que sin duda para mi parecia imposible... Yo; un pobre pintor, de verdad estaba loco por pensar que ella sentiria algun indicio de deseo por mi, mi ereccion esta dura como piedra doliendo y ardiendo bajo mi jeans, necesito de ella, pero sus pensamientos no sucumben a compartir mis fantasias.

Era perfecta, la mejor obra de mi vida, quisiera arrancarla del lienzo, tenerla para mi, siempre y dispuesta, corriendo hacia mis brazos para reclamarla, tomarla, casi olvidaba que ese mismo cuerpo estaba ahi, humana, sentada solo a unos centimetros de mi, hasta que su calida voz me pregunta ''¿Terminaste?'' solo la miro y no puedo responderle, la excitacion es demaiada, se levanta y me quita el pincel y la tabla de las manos, me observa como si buscara algo, quizas explorandome, acuna mi rostro en sus manos y por fin, me besa, sus labios se unen a los mios y mi lengua explora su boca, me besa fuerte, exigiendome, estoy sorprendido y sediento de ella.

Despego sus labios de los mios, me mira por ultima vez, apaga el cigarro, coge ese vestido que va a corde con su espectacular cuerpo; me deleito una vez mas y la miro mientras me dedica una calida sonrisa y sale por la puerta... Solo quedo observando el lienzo; una obra casi perfecta pero sin vida como su unico recuerdo.

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Quiero agradecer por la colaboracion de este escrito a Genesis Medina quien junto conmigo escribio esto hasta las 5 de la mañana sin importar los kilometros de distancia que nos separan, sin duda valio la pena el desvelo, espero les guste...